Qué dura es la vuelta a la rutina, sobre todo cuando se viene de descubrir un país como Croacia. Un país al nivel del resto de Europa y a la vez aún salvaje, con un conflicto armado tan cercano pero que apenas ha dejado huella, con unas gentes extraordinarias y con una naturaleza que invita a perderse y no volver.
Dubrovnik, Mljet, Split, Plitvice y Hvar. Os hablaré de todo ello en detalle…