Los vídeos de YouTube nunca se han caracterizado por tener una calidad de imagen demasiado buena. Y esto no ha sido simplemente una cuestión de economizar ancho de banda y mejorar en velocidad. YouTube, desde el principio, ha guardado los vídeos que ha enviado la gente en la calidad en que se han recibido. Lo que vemos en la web es una versión en calidad reducida.
El tiempo pasa y las velocidades de Internet van subiendo, con lo que YouTube ha decidido hace unas semanas abrir el grifo y permitir que veamos los videos en mejor calidad. Para ello hay dos maneras de hacerlo. Una, la artesanal, es añadiendo un parámetro al URL que tengáis:
- Calidad Normal (no añadir nada). Ejemplo.
- Calidad Media (añadir &fmt=6). Ejemplo.
- Calidad Alta (añadir &fmt=18). Ejemplo.
La configuración de base es una resolución de 320í—240 pixeles y un audio a 22 kHz, en la media, la resolución es de 448í—336 pixeles y el audio 44kHz y en el último caso se cambia a un codec H264 (mucho mejor que el H.263/Sorensen que hay por defecto) con AAC audio de 48kHz y resolución de 480í—360 pixeles.
Si queréis ir más rápidos, YouTube ofrece la posibilidad de hacerlo directamente en su panel de configuración.