Que conste que lo hago de mil amores y sobre todo siendo para unos buenos amigos… pero creo que me retiro del mundo de la fotografía de boda. Uno se lo pasa bien el día de la boda, pero luego quiere ser cada vez más perfeccionista y esto se convierte en un infierno. Y dos bodas en un año, sí hace daño…
Dejemos hoy que NeatImage quite el ruido a los cientos de imágenes que ya he retocado. El maquetado del libro irá rápido… al menos eso espero.